Canalizado por RAFAEL
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A 9 DE Marzo de 2010
Soy Yeshua, Jesús el Maestro. Y es que vengo ahora a ti para comunicarme contigo. Durante el día de hoy sé que habías querido una mayor ampliación de la última comunicación que tuvimos sobre la importancia de la alimentación, pero, como tú mismo has notado, me ha sido totalmente imposible comparecer por la ocupación tan intensa que requiere de mi presencia en los planos superiores y también en todos los acontecimientos que están teniendo lugar en la Madre Gaia. Es por eso que, ahora que ya estás en la cama (2h 30min de la madrugada) también encuentro en ti el momento apropiado para establecer la conexión.
En cuanto al tema de la alimentación sobre el cual expresé la suma y vital importancia que tiene para todos aquellos que quieren ascender y quieran conseguir los objetivos evolutivos que fueron planteados antes de su presente encarnación, sólo me queda decir y atestiguar ante todos mis hermanos que dentro de la toxicidad inherente en la gran mayoría de los alimentos, las carnes vienen a ser los productos más perjudiciales para vuestros cuerpos, con la consiguiente bajada del cociente energético de luz en vuestros campos de energía. Esto provoca la desconexión con las dimensiones superiores y con la Fuente, encontrándoos de nuevo con las emociones de vibración más baja, que serán llamadas a ser sentidas de nuevo por vosotros.
No dudéis en ningún instante que el estado nocivo de los alimentos no es casual ni aleatorio. Se trata de una acción más, contundentemente aplicada, por la élite gobernante de la oscuridad en la Tierra para provocar una reducción de la población mundial y, a través de la disminución de vibración energética de la población, conseguir en esta la desconexión de su propia divinidad, para que, así, esté sometida, amparada y sujeta a las energías del miedo, para que de esta forma pueda ser manejada, controlada y manipulada con mayor facilidad a través, en gran medida, de los incesantes bombardeos de información, meticulosamente estudiada y programada, en gran parte de los medios de comunicación.
Beban mucha agua para limpiar la toxicidad en sus células. El cuerpo les irá pidiendo la cantidad necesaria. Basen su alimentación en los vegetales: frutas, verduras y hortalizas, porque, además de lo que he comentado anteriormente, hay que reseñar que si ustedes ingieren alimentos procedentes de animales, o sea, carnes y pescados, están incorporando también las energías del miedo y del sufrimiento que estos seres experimentaron cuando les fue arrebatada la vida por las manos del hombre para ser utilizados en su alimentación. Ustedes ya saben que la conciencia del conjunto de un animal queda también grabada y plasmada en cada una de sus células, al igual que pasa en el resto de los seres, y, por tanto, al consumir las carnes y los pescados están incorporando a sus campos energéticos las energía densas y pesadas del miedo y la agonía que el animal experimentó antes de desencarnar, antes de dejar la vida en este plano.
Tomen el sol al amanecer y al atardecer, cuando esté en posiciones bajas, porque así también adquiriréis las energías fotónicas del Padre Sol, también necesarias para el desarrollo tanto físico como espiritual. Tened en cuenta que estas energías las estáis tomando en alimentos vegetales que han estado expuestos previamente al sol y han absorbido esta energía, y, cuando los coméis, las estáis agregando a vuestros cuerpos. Podéis tomarla directamente, ya que esta energía fotónica tomará un papel determinante en este sentido para los seres humanos en un futuro no muy lejano.
Es importantísimo que, debido a los elementos químicos a los que son sometidos vuestros alimentos, estos, además de ser lavados cuidadosamente antes de ser consumidos, sean también bendecidos por vosotros con mucho amor por vuestra parte, justo antes de empezar a comerlos. Hagan una oración en silencio y de corazón al Padre Eterno, ofreciéndoles sus alimentos, que comparta con vosotros el momento de la comida, si esa es su voluntad, y que la bendiga en el nombre de la Santísima Trinidad. Podéis hacer como acto final tres señales de cruz con vuestra mano derecha sobre la comida una vez que esté sobre la mesa. Y, así, la Luz de la Fuente cubrirá vuestra mesa, penetrando vuestros alimentos para el bien y el beneficio de los hijos del Padre en la Tierra. Pídanlo en el nombre de la Santísima Trinidad.
No obstante, y ya muchos de vosotros lo sabéis, cuando vayan a coger algún producto vegetal de la planta o del árbol pidan la bendición del Padre Creador antes de hacerlo y bendigan a ese hermano vegetal que os ofrece sus frutos con amor, porque, cuando los tomáis, el acto en sí genera un dolor interno en dicho vegetal que lo asume con amor por vosotros.
Este ha sido mi mensaje completado acerca de la información que podáis requerir sobre las cuestiones que tenéis que tener en cuenta a la hora de alimentaros, para que vuestro crecimiento espiritual no se vea ralentizado, sino que fluya al ritmo adecuado en vosotros requerido para estos tiempos. Recordad que toda medida es vital para vosotros y para la consumación del Plan Divino para la Ascensión de la Madre Gaia.
Somos uno, hermanos del planeta Tierra. Somos Uno. Y se despide de vosotros hasta muy pronto vuestro hermano que os ama, Jesús, Sananda, Príncipe Planetario de Urantia, la Tierra.
Benditos seáis.
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