miércoles, 2 de febrero de 2011

Mensaje del Padre Creador - 02.02.2011

Por Ngari

ngari09@hotmail.es

http://escritores-canalizadores.blogspot.com

Amados hijos.

Quiero deciros hoy que estoy perfectamente consciente de todos los ataques que estáis sufriendo por parte de la oscuridad. Vuelvo a repetir que no os preocupéis por ello. Son los últimos cartuchos de quién ya no puede sostener la realidad a su bel placer. Mi Voluntad se está manifestando en todos los rincones del planeta, a despecho de los intentos desesperados de aquellos que no comprenden que han llegado al final del camino. Todos mis hijos están y estarán protegidos. No permitiré que les toquen siquiera un hilo de su cabello.

Dicho eso, para que sepáis: Sananda está al mando de la Confederación Galáctica y también del Gobierno Divino en la Tierra. Todos están en máxima alerta para ayudar la Humanidad a superar esta, que es la fase más difícil de su limpieza y purificación. En las zonas de huracanes y grandes desastres naturales, ya están contando con el rescate por parte de los hermanos extraterrestres. Claro está que eso (aún) no va a salir en sus noticiarios de la televisión. Pero ya llegará…

Vuelvo a repetir: guarden algo de comida y agua. Lo van a necesitar muy pronto. A todos mis hijos que leen eso: ya no hay tiempo para hacer cosas que no sean estrictamente necesarias. Utilicen el poco tiempo que resta para conocerse un poco mejor y trabajar su interior para que puedan recibir el gran regalo que les estamos preparando. Muy pronto se verán transformados de oruga a mariposas... listas para desplegar sus alas y volar,

en completa libertad.

Yo Soy vuestro Padre Creador y os dejo totalmente seguros y rodeados por mi gran amor por cada uno de mis hijos.

(- Gracias, Padre, por enviarme ayuda ayer, cuando tanto lo necesité…)

- Hija Mía. Sé perfectamente que eres punta de lanza para el pleno desarrollo de mi plan en la Tierra. Tú y todos tus hermanos que ejercen esa función están y estarán siempre protegidos. Jamás iba a permitir que les pasase algo. Quédate en Paz y sigue adelante con tu lindo trabajo. Te bendigo siempre.

Gracias, Padre…

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