lunes, 29 de noviembre de 2010

Agradecimiento - Aclaración - Historia "Un Regalo Grande como una Casa"

De: "Audrey Alana" <audreyalana2010@gmail.com>

29 de Noviembre de 2010 11:28 a.m.

http://escritores-canalizadores.blogspot.com

Querida Alexiis:

Quería agradecerte que hayas publicado lo que escribí sobre mi testimonio de Lemuria y a su vez agradecer a todos los que se contactaron conmigo a raíz de esa publicación a través de mi email. Lo hago público porque no sé si a todos les llegó mi respuesta y porque aún no sé usar la opción “responder” que se encuentra en tu blog “escritores – canalizadores” para introducir comentarios o para responder a los que ya fueron enviados.

Al respecto, cabe una aclaración al comentario enviado por Alejandra a través del blog.

Quizás yo no me expresé correctamente y di pie a que se mal interpretara lo escrito. Los maestros dicen que nuestro lenguaje o nuestra forma de comunicarnos es imperfecta, limitada, fuente de error  y que ya volveremos a recuperar las habilidades que teníamos antes (por ejemplo con la telepatía). Eso ahorraría esfuerzos en aclaraciones. No digo que Alexiis y yo somos los únicos seres lemurianos que existen sobre la faz de la tierra, digo que yo no conocí hasta el momento de escribir el testimonio, a ninguna otra persona con la que haya hablado, con la que me haya relacionado personalmente que me reconociera  su origen lemuriano, que me dijera “yo también”. Luego de la publicación de Alexiis he estado en contacto vía email con personas que se saben o intuyen lemurianas y que así lo manifestaron. Con respecto a lo que cuenta Alejandra, me parece maravilloso que hayan podido encontrarse y que puedan trabajar juntos como lo están haciendo en el sur argentino para beneficio de toda la humanidad. Gracias.

Y ahora por último quisiera compartir una breve historia que en su final los incluye a todos. Se llama “Un regalo grande como una casa”.

En diversas oportunidades y por distintos medios, por ejemplo lectura de registros akáshicos, se me hizo saber que mi misión, o mi aporte a la humanidad o a esta nueva era, está ligada con la comunicación, y con trabajar con comunidades. Pero hubo una canalización de GAIA a través de Pepper Lewis, en un encuentro que se hizo en Tucumán, Argentina, el año pasado, que fue terrible para mí. Con toda claridad, sin rodeos ni miramientos se me dijo que (no son palabras textuales sino la idea que se me transmitió), “se me iba a pasar la vida y yo no habría hecho nada con ella”. Pasó el tiempo y en este año realicé una consulta de mis registros akáshicos y plantee este tema, y los guías me dijeron que quizás yo lo recepcioné así, o lo sentí así, pero que la idea era mostrarme que no estaba haciendo nada de lo que debía hacer porque estaba muy comprometida en mi atención a solucionar temas kármicos de mi vida.

Se imaginan, trabajar en comunidad, que es lo que el espíritu le está diciendo a toda la humanidad, únanse en grupos, etc. Y yo con mi camino solitario. Comunicar qué? Cómo iba a hacer esto?. No lo veía. Sólo manifesté mi disposición a cumplir con mi parte, pedí guía y lo dejé.

El día que pude leer el correo que envió Alexiis sobre el Canciller de Lemuria, exhortando a cada uno a contar de sus orígenes, ese día yo había estado trajinando bastante, tuve reuniones en la oficina con mucha gente, salí a hacer trámites, etc. Y casi al terminar el dia laboral, estaba parada frente a la impresora de piso donde trabajo esperando la impresión, y me miro, así de costado. Yo tenía puesta una camisa que en vez de botones tiene unos broches a presión, con un detalle de color nácar en el lado que se ve, y sin nada en el lado que va para adentro. A su vez la camisa tiene unos falsos bolsillitos adelante para vista. Les digo esto para que entiendan lo que voy a contarles. Me miro y digo, que raro este pequeño dobladillo y ahí me di cuenta que estuve todo el día completo con la camisa al revés. Nadie, ni yo, se había dado cuenta, porque les aseguro que me lo hubiesen dicho. Me empecé a reir de mí misma y lo comenté con todos los que tenía al lado. Me dijeron “vas a recibir un regalo” y contesté “si, pero grande como una casa porque esto….”.

Y al rato, casi llegando a su fin el día leí el correo de Alexiis. Y sí, para mí fue un regalo grande como una casa, porque pensé que de eso sí podía compartir, mi propia experiencia. Pero cuando estaba escribiendo sentí que debía hacer algo más, y era convocarlos a mí, porque intuía que de alguna forma a través de todos ustedes se me iba a ir indicando cómo seguir, qué hacer, se me iba a manifestar la guía del espíritu de la mano de los ángeles que son ustedes. Por eso les pedí que me cuenten sus experiencias al respecto de Lemuria. Y así fue. Así que, quería que supieran que cuando me contestaron me mostraron un camino que quizás andemos juntos. Gracias.

Gracias Alexiis por publicar esto también. Un abrazo a todos. Soy Audrey Alana.

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