jueves, 18 de noviembre de 2010

MENSAJE DEL ARCÁNGEL GABRIEL

RECIBIDO POR HECTOR M. GALINDO D.

EL DIA 27 DE OCTUBRE DE 2010 EN ZAPOPAN-MÉXICO

Escrito por Rosa Gloria Cisneros G. edición y puesta en la red María Rosa Gareca

Una vez más con ustedes GABRIEL, saludándoles y dándoles la bienvenida.

A aquellos ausentes, háganlos partícipes con los mensajes que les venimos a traer. Ellos tienen ocupaciones que, a lo mejor, ustedes ni ellos mismos entienden por qué se dispersan.

Les estamos recordando, desde hace algunos años, en su tiempo lineal, que se tomen de la mano, que permanezcan unidos y no dispersos.

Si ustedes se fijan, todos, en la unidad, tanto Arcángeles como Seres de Luz y Maestros Ascendidos, en esa totalidad que es Una, coincidimos en lo que es la unión.

La unión la hace el Amor. Precisamente esto adhiere lo que hay en el universo y más allá.

Inexplicablemente, por diversos motivos, ustedes se separan para donde quieren seguir su camino independiente, y ya eso, es vivir en el pasado, es vivir en el pasado, como vivieron aquellos seres llamados por ustedes ermitaños, que tenían qué vivir de la soledad y vivir su mundo separándose, viviendo aparte del mismo mundo que los rodeaba; así era en aquellos tiempos.

“Ahora la propuesta, el camino hacia la verdad, en estos tiempos es la compañía de todos en la unidad formada con el Padre y nosotros, porque Todos somos Uno”.

Se dispersan amados míos, y ahorita, en estos momentos, como ya se les ha venido diciendo desde hace años "que no se alejen los unos de los otros para que se compacten en Unidad. En esa unidad que lleva el Padre"…así se debe vivir en esta Era.

Se acabaron las individualizaciones (los individualismos), es momento para que aprendan a convivir unos con otros con amor, sin discriminaciones.

...Que porque aquél y éste otro no piensan igual que yo o no saben lo que yo, mejor me separo de él, mejor me separo del grupo. Y vean ustedes, tienen mucho material para reflexionar, en cómo les va en su caminar de ese modo. Tienen escritos de historias, en las que grandes agrupaciones van desapareciendo de la noche a la mañana.

Ya Saint Germain les había comentado en sus escritos, que se desprenden (se separan) y van enfriándose, por así decirlo, de sus actividades, de esa fusión con el Padre. Mas como se les ha dicho también, es el libre albedrío de cada cual, es la libertad que sí tienen.

Sin embargo, en ese tomarse de la mano, se van dando fuerzas unos a los otros en ese caminar, como muchos de ustedes saben.

Se les van marcando los escalones, nosotros mismos en la unidad se los vamos indicando y les decimos: ya es tiempo de que caminen, ya entendiste lo que tienes qué hacer, háganlo y siempre tienen nuestro apoyo.

Este apoyo estará ahí, siempre y cuando ya estén realmente preparados, no con la creencia que les hace pensar esa "mente externa" que, con su ego pavoneante, les dice “camina ya”, “ya puedes”.

No es así, amados hermanos, recuerden lo que les hemos dicho, es siempre: “Céntrense en su Yo Superior”, que es su "Mente Superior". Cuando dominen o equilibren la Mente Superior, que es su Yo Interno, con la mente externa, entonces podrán discernir.

Distingan ustedes lo que viene del ego, y lo que es o procede de la luz, de lo puro, de su Ser. Cuando sepan realmente distinguirlo, podrán caminar solos, pero no solos por un sendero de oscuridad, sino por un sendero en el que vayan irradiando esa luz que son, invitando a despertar en su caminar, haciéndolos partícipes de aquellos conocimientos.

Ya no se dejen llevar por esa "mente externa" (del ego); todos se lo hemos dicho. No nos cansaremos de repetírselo para que se lo graven en su mente y en su corazón y lo demuestren en su actuar.

AMOR… amados míos… AMOR. El AMOR une, el desAmor separa;

“El amor Une”, “El desAmor Separa” ¡GRÁVENSELO!.

Quiero darles la mano en su caminar, pero inviten a todos aquellos para que esa mano que les doy haga una gran cadena.

Se los digo, que se acabaron los tiempos de las “individualidades” estamos con el afán de que sean grupos numerosos, pero en Unidad.

Con mi Luz los envuelvo y con estas palabras los dejo.

Namasté amados.

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