http://www.rionegro.com.ar/diario/opinion/cartas.aspx?idart=405773&idcat=9538&tipo=2
Estamos perdidos si no analizamos más profundamente lo que nos está sucediendo…
Estamos perdidos, listos, acabados si no le damos el realce justo a lo que estamos sufriendo…
¿Qué les estamos proponiendo a estos chicos que siguen naciendo? ¿Qué les proponemos como forma de felicidad? ¿Qué les proponemos como meta en la vida?
¿Qué le proponemos como principio básico de ilusión, de convivencia? ¿Qué les proponemos como ideal?
En muchos momentos les propusimos conseguir la libertad de los pueblos oprimidos con más violencia.
Les propusimos romper todo y que aceptemos la verticalidad del pensamiento… Les propusimos la felicidad en el consumo… Les propusimos la felicidad del entender que sólo serás feliz si tenés lo que el otro tiene…
Les propusimos que sólo la felicidad se tiene si sos tan alto, tan rubio, tan lo que sea… como ese alguien que no son ellos mismos…
Les dijimos que sólo siendo alguien que no eran ellos llegarían a tener el mérito de la felicidad…
Les propusimos una zanahoria tan grande y tan distante que nunca pueda el hombre alcanzarla, porque los méritos para ser feliz son inalcanzables, porque los méritos para ser feliz, se desvanecen en cuanto los tocás…
Le enseñamos a la gente que no crea en sí misma y que no crea en nada de lo hecho, en nada de lo dicho…
Les enseñamos a los que vienen detrás que no importa lo que hagan… la felicidad es imposible de atrapar.
Les enseñamos que sólo la rabia, el enojo, la impotencia es un estado real… Les enseñamos que el "Consumo Express", ese que te aleja de la realidad y te lleva a la distorsión, es una posibilidad real de sentirte mejor…
Les enseñamos, que amar es una utopía, un sueño difícil de alcanzar… Les enseñamos que vivir es una lucha eterna que no merece más que algún pequeño descanso para recomenzar… Les enseñamos lo que sabíamos… y les enseñamos, algunas veces, a mantener la esperanza para poder aún luchar… Les enseñamos que sufrir es una cosa y mostrar por qué sufrís es otra…
Les enseñamos tantas cosas que quedó claro y entonces es fácil ocultarse… y ocultarse trae como consecuencia que no puedan más que hacerlo en su propio dolor, para no darle el gusto al tipo que está ahí afuera, sancionando su increíble capacidad de esconderse…
Y seguimos manifestando y gritando… Y haciendo y deshaciendo, sin lograr un rumbo coherente donde estar y sentir, donde confiar y desplegar alas que nos permitan volar en otros cielos que no sean estos…
Hoy es tiempo de razonar.
¿Con qué vas a cambiar todo lo que está?
¿Con qué vas a implementar nuevas formas de actuar si con lo que venís ofreciendo no lográs más resultados que este mismísimo camino de dolor y de frustración?
No se cura la violencia con violencia. No se cura el dolor con más dolor. No se cura la idea de "dar palo" y dar y dar y dar… con más palo. Hay algo que hay que cambiar y es más profundo…
Darle al hombre su dignidad de ser hombre. Darle al chico, su maestro ideal. Darle al maestro, su alegría de enseñar. Darle a la educación, el privilegio que te da el saber. Darle al saber la preponderancia y el estatus que te da el conocimiento. Darle a la vida el mérito de poder inteligentemente, comprender.
La vida es un espacio donde vos y yo tenemos que confiar que estamos solucionando cosas de verdad.
La vida es una suma de acontecimientos que tienen que fortificar al individuo y hacerlo desarrollar sus increíbles capacidades.
La vida es algo que tiene que ser cuidada, valorada … pero sobre todo entendida desde un lugar superior.
Si la vida es obra de la casualidad, nunca podremos darle el realce que tiene de verdad. La vida es el vínculo con tu sabiduría… La sabiduría es el vínculo con tu grandiosidad.
Carlota von Gebhardt, DNI 10.612.002 - Bariloche
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