6 de marzo, 2011
http://escritores-canalizadores.blogspot.com
Me encontraba en una casa humilde, no sé dónde, no la conozco. Era una casa sencilla, con una salita cocina, luego una especie de corredor destechado con un gran banco, como los de las plazas; luego otro anexo, donde estaban las dos habitaciones de la familia, y después un gran patio con árboles frutales. Allí se realizaba una fiesta, un cumpleaños de algún familiar mío. Entre ellos estaba mi difunta madre y mi hermana, quien aún vive.
De pronto, comencé a escuchar una algarabía en la calle. Salí de la casa a ver que sucedía y ví mucha gente aterrorizada, corriendo de un lugar a otro. Cuando dirigí la mirada al cielo, ví una cantidad de platillos voladores, más o menos pequeños, danzando en el cielo. Me asusté y me metí de nuevo a la casa. Cuando iba a esconderme, vi que una de los platillos voladores aterrizó en el patio trasero de la casa. Era una nave como de unos 10 metros de diámetro, con luces de muchos colores, igual a las que estaban volando en el cielo. Luego vi a alguien que se bajó de la nave y se acercó a mí; pero yo esquivé a aquel ser. Luego me armé de valor y salí de nuevo.
Me senté en el banco del jardín junto a mi madre, a mi derecha, y mi hermana, a mi izquierda, a ver todo lo que los hermanos de las galaxias efectuaban en el cielo. Parecía un carnaval de colores dibujados en el cielo. Luego vi unos globos de colores que ellos hacían con las nubes; muchos ramilletes de globos unidos con sus cordones y luego un lazo. Eran muchos ramos de globos por todas partes, que caían a tierra o quedaban danzando en el aire. Cuando uno los quería tocar se desvanecían, como pompas de jabón. Era como una fiesta en el cielo, de multicolores globos y formas geométricas. Los colores que se dibujaban en el cielo eran muy brillantes y vivos, colores primarios - azul, rojo (mucho rojo), amarillo, verde, naranja -, al igual que los de los globos.
Luego vi que ellos dibujaban una estrella - tridimensional, formada por 2 tetraedros inversos - con las nubes, y en cada triángulo tenía la palabra “DIOS”. Luego, desde el cielo, bajaron tres regalos: El que recibió mi mamá se le desapareció entre las manos, igual sucedió con el de mi hermana; el que yo recibí me llegó a mis manos directo; lo noté tangible, lo sentí tibio al tacto. Abrí la bolsa de regalo y era un libro; un libro pequeño con el título “MAESTRO DE MAESTROS” (Pienso que el único maestro de maestros es Sananda, o Jesús, respetando siempre la jerarquía de los demás maestros, por supuesto). Mi hermana y yo comentamos sobre el libro, luego miré a mi madre y le dije:
- ¿Viste mamá? ¿Ahora si me crees? Ellos existen y son nuestros hermanos de las galaxias.
En su rostro se dibujó una sonrisa y me contestó afirmando con un movimiento de cabeza y me acarició el rostro.
Arlenis Suárez
Yo también soñé algo muy parecido
ResponderEliminar