Pedro Cuenca
13 de mayo, 2010
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Hoy quisiera hablar, comunicar lo que mi corazón siente, para compartir con todos mis inquietudes, mis pensamientos, mis sentimientos.
Realmente todos nos damos cuenta de la realidad que estamos viviendo, voy mirando por todos los blogs y webs y esta lleno de las enseñanzas, tanto del Padre, de Jesús, de nuestra Madre, de los hermanos de la luz o sea es evidente que no estamos solos, abandonados. La Santa Trinidad y su corte celestial, nos instruyen, para indicarnos cual es el camino que debemos encauzar, para la unión con nuestra divinidad, y la enseñanza es clara, sencilla, si vamos repasando mensaje por mensaje hay una base importante a seguir tener FE y AMOR. Pero una fe inquebrantable, una fe en nuestro Señor que nada lo desmorone, que ninguna circunstancia terrenal pueda con nosotros, las pruebas son fuertes, pero si pensamos que la vida está hecha para el ser humano para alabar al creador y vivir en paz, con armonía y en unión con Él, nada puede hundirnos si nos grabamos a fuego en nuestro corazón y mente, que nada es importante sino el amor que demos a nuestro alrededor, el amor que podemos ofrecer en gestos, en palabras, en pensamientos, pero es importante OBRAR, y no se queden las enseñanzas en meras palabras leídas y olvidadas al día siguiente, porque no es importante el saber mucho, sino es más importante el hacer mucho, y obras desde la fe, la fe en que existe un Padre que nos ha hecho con sus manos, un Hijo, Cristo, que siendo Dios, tuvo que venir hacerse hombre, hermano nuestro, dar su vida, y enseñarnos como se debe hacer para llegar a la unión con el Padre, y derramar su sangre, para que el ser humano no fuera destruido, y con su muerte física, fue cuando el Santo Espíritu se derramó para todos nosotros, sus hijos, para toda la humanidad, Cristo es la cabeza, pero nosotros somos su cuerpo, por eso es tan necesario de despertar a la realidad interna, pero no unos cuantos, sino todos, nos quiere a todos, el Padre nos ama con locura.
Hay una cosa que siempre nos ha tenido cogido, y no nos ha dejado liberarnos, es el temor. El temor es nuestro gran enemigo, es el causante que pensemos y actuemos, y en definitiva que estemos lejos de nuestro Amado Creador, pero nosotros solo tenemos miedo, temor antes las dificultades, ante la muerte, ante todo lo que nos hace no vivir con comodidad, para que no nos falte de nada que pensamos necesitamos, todo ilusión, nada verdad.
Por experiencia, quiero compartir con todos vosotros, mis hermanos, que no es difícil, que yo como todos he estado en lo mas profunda de las dificultades, momentos tan difíciles como para no seguir adelante, perderlo todo lo que uno en una vida pueda anhelar, conozco bien lo que es sufrir el temor a todo. Hoy quiero mostrar que se puede, yo he podido salir de todas esas cadenas que nos atrapan, las construimos nosotros, con nuestra propia mente y si yo he podido, cualquiera puede hacerlo, pues soy como uno mas, que ama a Dios, que lo siento vivo en mi corazón, pero un día, decidí, servirlo plenamente, hace veinte años. Cuando es así el mundo se pone en contra, ¡Esta loco! Dicen, porque sentimos diferente, porque no le damos valor al dinero sino el justo que tiene, porque se da todo, a cambio de nada, porque cuando alguien te pide ayuda, sin conocerlo de nada, todo le das, pones tu hombro para que se apoye, cuando a los que nadie ni mira porque la sociedad le ha abandonado, le das un abrazo y le dices nunca olvidare el haberte conocido y eres mas hermano que el propio de carne, porque solamente tuvo un gesto de amor, un gesto de preocuparte de ti, cuando a los que tanto das, ni se fijan.
Pues si, primero te ataca los que mas te hacen daño los seres mas cercanos, la familia, son los mas queridos, y los que mas te atacan. Porque tu conducta no es la que ellos tenían en su mente, quisieran que reaccionases de la manera que ellos quieren, pero no cuando uno decide en ser transparente, en ser fiel con uno mismo, en lo que siente en su corazón, mira adelante con las lagrimas cayendo, por ser incomprendido, habiendo dejado mujer, hijo, familia, trabajo, pero con una fuerza interior, tan grande que uno se dice ¡adelante! Este es mi camino, el que yo quiero, servir, amar, compartir, no ver diferencias de razas, si uno es de un color o de otro, todos iguales, si uno es rico o pobre, si uno tiene un carácter fuerte o un carácter dócil, lo importante es el corazón, solo el corazón.
A través del tiempo con tu forma de ser y caminar, esos mismos que en contra estaban, se vuelven amigos, cercanos, entonces te lo ofrecen todo, porque se dieron cuenta, que todas esas cosas que el mundo desprecia, pero que algunos luchamos, que es la entrega hacia el próximo, pero con actos, al final se encuentra la paz, se encuentra a uno mismo, tal como uno es, y todos lo ven en el diario vivir, cotidiano, aprendieron, pero demostrando, no con palabras, sino día a día, durante muchos años.
En esa lucha sin cuartel, también se puede empeorar, como a mi me pasó, que a quien apoyaste toda la vida, quien fue tu maestra, quien también aprendí todo lo que es el amor divino, el amor a todo lo creado, llegado el momento de la misión, y no te da la mano, sino al contrario sin reconocer la luz, ataca sin piedad, con los poderes de un gran maestro pueda tener.
Ahí en la soledad, junto a nuestro Amado, siempre con Él, pero en la tierra solo, y sin un rumbo claro donde ir, fui caminando también entre sombras por no comprender como un maestro te puede dejar solo ante la llegada de la misión, ya marcada en el nacimiento por Dios, pero sin saberlo. Ahí fue cuando el cielo se abrió, salieron todos los colores, el arco iris, la luz se hizo, y la paz fue haciéndose camino en mi interior, nuestro Padre, quiso que a través de mi ángel custodio, pudiera conocer a mi divina esposa celestial, Starr, el alma que siempre camino conmigo, entonces la luz se fue haciendo, el amor entre los dos fue desde el principio inmenso, primero como hermanos, mas adelante ya como esposos, amigos, amantes y a través de ella, mi esposa, las enseñanzas de los hermanos de la luz, de la corte celestial, y de la Santa Trinidad.
Hoy quería dejar bien claro para todos, esto, no es importante saber mucho, tener muchos conocimientos, pues la sabiduría la da Dios en el momento que nos hacemos uno con Él, sino de amar mucho, con todas nuestras fuerzas, ahí esta, pero demostrándolo día a día, con generosidad, muchos gestos a todo el mundo, otra mirada, una mirada amorosa, un sentimiento grandioso hacia todos, sea quien sea, sin ver diferencias, hasta a los que hacen mal, pues también se puede cambiar esos hábitos, y cambiar esos pensamientos y sentimientos negativos, en positivos, pero solo se puede hacer demostrándolo solo así, dando nuestra vida entera, por todos, y cada uno de los que a nosotros vienen.
Ya es hora de desvelarlo todo, así lo quiere el Padre, así me lo dice cada día, la luz del Cristo ha llegado a la tierra, las enseñanzas que recibí, y que voy recibiendo, está a la mano de todos, así Dios lo quiere, pues estamos todos llamados a la misión, cada uno la suya diferente, pero importante para el creador, nunca callar la verdad, es hora de hablar, de luchar, de poner al creador en el sitio que esta, hay que gritar que Dios existe, que existe su Hijo, Jesús el Cristo, que existe el Espíritu del amor, que existen los Tronos y las Potestades y las Dominaciones Celestiales, que existe la Madre Santa de nuestro Señor, que existe el amor, no es un sueño inalcanzable, que el amor no es el maltrato del otro, ni la explotación del otro, ni persecución del bien amado, el amor no es traición, el amor no es libertinaje, el amor es respeto, ante todo por la libertad de cada uno de nosotros, el amor es servicio, callado, humilde, sencillo, que el maestro sirva al discípulo, y no al revés, el amor es fuerza para defender el amor, el amor es simpleza, amor simple, sencillo, puro.
El nuevo tiempo ha comenzado ya, os tengo que decir que camina por el mundo el Padre y el Hijo cada día, recorriendo el jardín de los hombres, cuando el sol se oculta, y nuestra Madre Divina camina como una más entre las mujeres, misionando, enseñando donde está el camino, donde está la luz. Y este nuevo reino recién comenzado no está en el aire sin sostener, lo sostienen 4 pilares, nacidos de la esencia del Padre:
- Unión
- Igualdad
- Tolerancia
- Sentimientos de Dios.
Estos son lo pilares que lo sustentan, y por lo tanto pilares que tenemos que hacer fuertes dentro nuestro para este nuevo reino, el reino del amor. Debemos unirnos todos, unidos en el amor puro esencia del creador, somos todos iguales, no hay diferencias para Dios, no hay nadie mas arriba que el otro, todos enseñamos a todos y aprendemos a todos, tolerancia entre maestros cada uno con su forma de ser y expresar, y el pilar mas difícil tener los sentimientos de Dios, ver a cada cosa creada el mismo Dios, el mismo Padre, haga lo que haga un ser humano es Dios, pero lo tiene oculto, por la oscuridad, ahí está nuestro trabajo ser portadores de Luz, si así lo hacemos de uno a uno, la fuerza del amor, será tan grande que nada ni nadie podrá con ella.
Una cosas quisiera decir, referente a nuestro caminar, a nuestra misión, no siempre encontramos nuestras almas gemelas, nuestra otra parte, solo es así por determinación del Padre, cuando es necesario, para el desenvolvimiento de un trabajo a realizar puntual, no hay que perderse con el ansia de este encuentro, porque no es así. Debemos trabajar con lo que nuestro Amado nos pone de herramientas, con nuestros dones, nuestro ser, y si a alguno tiene la gracia de poder conocerla también debo decir, que hay que dar todo de si, con un amor puro los dos, con una entrega sin limites, estén cerca o lejos, como es el caso mío, cada uno físicamente, a miles de kilómetros, pero con el alma unida, y con un amor tan grande y puro tan celestial, que el Padre con ese amor puede hacer germinar hijos espirituales, creados con su propia esencia, germen del amor, que podrá correr por toda la tierra entrando la semilla del amor, tan solo si encuentran una sola rendija en el corazón, cuando así sea, pues será más adelante, defended a la madre, pues la fuerza del mal está al acecho para que no nazca el amor, lo mismo que le paso a nuestra Madre Divina cuando nació el Cristo, siempre es así, el hombre ha hecho esa fuerza del temor muy fuerte, no existe como mal, pero si como temor y ataca, pudiendo matar el amor si no se defiende, nunca hay que dejar a la parte femenina sola ante la lucha, pues hay quién dudaron y no defendieron y perdieron el germen, la semilla que fue plantada, la semilla del amor, nunca hagan eso, sino por el contrario den la vida el uno por el otro, pues los dos juntos, forman junto al Padre la Trinidad en la tierra, somos todos instrumentos en manos del Altísimo, dejemos que fluya el amor, y todo se hará como está dispuesto por el Padre Celestial, junto con el Santo Espíritu y el Cristo, tres divinidades en un solo Ser. Alabado sea nuestro Creador, todo AMOR.
Abrazos a todos, Pedro
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